Receta muy del sur de la tierra, que yo no hago mucho por el tema de las espinas, pues aunque van limpias, siempre queda alguna atrapada en la carne, difícil de sacar que luego da la lata. Pero eso no significa, por supuesto, que no sea un plato sano, con pescado azul de temporada y verduras de andar por casa, fáciles de encontrar y preparar. Lo más entretenido es la limpieza de la sardina, que dan ganas de hacerle el entierro directamente, lo demás es coser y cantar: un sofrito, un calentón al pescado y a comer. Podemos buscar un entorno hermoso, como una terraza con vistas al mar, y el disfrute será mayor, pero a riesgo de repetirme, lo mejor es la compañía para que la comida sea perfecta. Así que vamos a darle una oportunidad a las sardinitas, por encima del olor, a pesar de las espinas, aprovechemos los beneficios que proporcionan, ahora que se encuentran en todo su esplendor.
Ingredientes:
-1 kg de sardinas
-2 cebollas
-2 pimientos verdes
-6 tomates pera
-1 cucharadita de orégano
-1 c/s de pimentón dulce
-200 ml de vino blanco seco
-Aceite y sal
Preparación:
En la pescadería me limpiaron las escamas de las sardinas, pero cabeza y espinas, incluyendo la espina central, lo hice yo en casa. Es entretenido, pero poco a poco, una detrás de otra, hay que dejarlas igual de limpias que los boquerones para vinagre. Les ponemos un poquito de sal y reservamos. Pelamos y picamos las cebollas, comenzamos a sofreírlas en un fondo de aceite, añadimos los pimientos sin semillas, también picados. Los tomates los rallé desechando la piel y se incorporan al sofrito. Después sal y orégano. Cuando las verduras están pochadas y el tomate ha perdido el líquido se pone el pimentón, se rehoga y se vierte el vino, se deja evaporar el alcohol. Se colocan las sardinas encima de la fritada en la forma que más nos guste, pero que queden estiradas sobre las verduras. Se tapa la cazuela y se cocinan a fuego medio- bajo hasta que estén hechas, unos diez minutos. Listas para degustar.
Lola, este plato es para hacerle la ola, independientemente de a mitad de la limpieza hacerle el entierro, cual entierra de la sardina... ja, ja, ja, imagino el curro que tiene dejarlas limpias, seguro que el resultado final tiene doble premio, el sabor y la perseverancia.
ResponderEliminarEs el pescado que más me gusta, en verano hago de vez en cuando (en el jardín) pues en casa no puedo del olor que deja de recuerdo, pero me encantan, te diría que más que un lenguado.
Intentaré probarlas a ver si tengo tiiempo y las hago.
Bueno, Lola, a pesar de estar cerrado el blog de momento, sigo intentando no perderme nada, este plato no podía pasar desapercibido.
Mil besos
Lola yo me apunto encantada.
ResponderEliminarPara mí lo peor del pescado, espinas aparte, es tener que limpiarlo. De hecho soy incapaz, es algo que me supera. Aparte de limpiar los calamares con el resto de pescados no puedo ¡menos mal que en la pescadería son apañados y lo hacen por mí!
Ay quién pudiera coger esa terraza con vistas al mar. Yo me conformo con las vistas al parque, a la fortaleza que nos corona y a un bonito mar de olivos (que me ahoga en primavera)Al menos no tengo vistas al balcón de ningún vecino que vea la televisión en calzoncillos ja ja ja
La receta de hoy te ha quedado espectacular ¡como me gustan los platos de toda la vida! ¡Besos mil y feliz fin de semana!
No hace mucho he hecho una empanada con sardinas, de las más pequeñitas y estaba deliciosa, es más, las espinillas que tienen son tan insignificantes, por lo finísimas que son, que nunca me han dado ningún problema si las dejo sin quitar, lo que sí hago es sacar la cabeza, las tripas y la espina central, como buena gallega es algo que me resulta fácil y rápido.
ResponderEliminarY en cuanto a tu plato, me has dejado con las ganas de probarlo, no dudo de que tiene que estar exquisito, de manera casi igual suelo poner el bonito y está para chuparse los dedos, seguro que las sardinas también, no hay plato que tú hagas que sea malo.
Cariños y buen fin de semana.
Kasioles
Hola Lola.
ResponderEliminarMe encantan las sardinas... sobretodo a la brasa y en espetos... me pongo y no termino... que gustazo
Estas tuyas... ya te digo yo... que pa ponerse con el plato y darle fin...un buen fin... que esa fritada hay que dejarla repelá...
Menuda sartén preparastes... con lo que me gustan a mi las fritás.
Siempre que compré pescado mi madre me lo dejaba limpio...listo para cominarlo...pues no me gustaba hacerlo.
Menos mal que ahora en las pescaderías te lo dan arregladito... como tú lo pides.
Que paséis un buen fin de semana... mil besossss ¡¡¡
Se nota que soy del norte, porque este nombre nunca lo había escuchado. La verdad es que es una receta muy veraniega. Exquisita con ese sofrito de verduras. El único problema como bien dices es encontrarte alguna espina desagradable, por eso hay que comer con mucho cuidado para no llevarnos un susto.
ResponderEliminarYo no tengo vistas al mar pero por suerte tengo buena compañía, así que solo me falta ir a comprar sardinas y preparar este festín.
Feliz fin de semana
Sil
Ufff... hace siglos que no pruebo las sardinas,y que no me he pasado por vuestros blogs a comentar por falte de tiempo,esta receta la he probado con boquerones, mi madre muchas veces hacía de más para al día siguiente prepararlos así, tu plato tiene una pinta increíble, qué rico y sano
ResponderEliminarUn besito
Siempre que veo esta receta me llama mucho la atención, pero todavía no la he preparado. Un besote y feliz semana!!
ResponderEliminar¡¡Hola Lola!! Pues yo no conocía la receta, pero me parece estupenda, además, es que me gustan bastante las sardinas. Ahora, como bien dices, están en su mejor momento, y se nota porque están riquísimas. Bueno, lo de las espinas es verdad que es tedioso limpiarlas. Los boquerones se limpian bastante fácil, o eso me parece a mí, pero sacar los lomitos de las sardinas limpios, eso ya es otra cosa. Bueno, a mí no me importa mucho las espinas que quedan de las sardinas, son blanditas y acompañadas de un poco de pan, la mayoría de las veces ni se notan. Porque este plato, está para mojar pan y disfrutarlo de principio a fin, con o sin espinas. Besitos.
ResponderEliminarNo conocía esta receta.... Ya he aprendido otra más
ResponderEliminarHola guapa, me encanta, me gusta mucho. Con lo rica que ya está la sardina, si encima le quitas la espina y le preparas esa salsa ya imagino como debe ser su sabor. Bueno, la foto ayuda mucho a imaginarlo. Ideal, es una receta estrella. 🐟🐟🐟
ResponderEliminarRiquisima en casa la hago igual besitos
ResponderEliminarMe imagino el trabajo para limpiar las sardinas, pero sin duda merece la pena para disfrutar de esta delicia. Un bs
ResponderEliminarNo conocía esta receta, pero tienen que estar muy buenas. A mi no me molestan las espinas del pescado y menos si las sardinas son pequeñas. Tampoco me importa limpiarlo, aunque reconozco que me da un poco de pereza, sobre todo por la falta de tiempo.
ResponderEliminarApuntada queda.
Un beso.
Lola, menuda receta. No la conocía y me parece perfecta para mí. Yo lo peor que llevo de las sardinas son las escamas, pero al igual que los boquerones, me pongo y limpio cabeza y espinas sin problema.
ResponderEliminarMe llevo la receta y a ver si la hago, que llevo unos días a ensalada y algo a la plancha.
Besos y feliz semana.
Buenos dias Lola !
ResponderEliminarEs una receta que me encanta , a pesar, de la pereza que da limpiar el pescado, desespinarlo y desescamarlo, que aunque en la pescadería le quiten escamas, las sardinas siempre tienen para dar y regalar .
Solo tenemos que pensar en el disfrute de la comida cuando esté hecha y este trabajo se lleva mucho mejor.
El aspecto es inmejorable, tus fotos dicen ¡cómeme !
Un abrazo.
Hola! Pues para mi ración doble, porque esta salsa y acompañamiento tiene que estar para dejar el plato bien rebañado. Me encantan:) voy sacando la cervecita... besos :)
ResponderEliminarLola cielo las has bordado te puedo decir q ni a las q somos de pura cepa del sur nos salen tan ricas como las tuyas están perfectas Mil besicos preciosa
ResponderEliminarHola Lola, esta receta me parece una joya, de verdad. Nunca las he preparado así y me has tentado. Un beso guapísima!!
ResponderEliminarPues mira, las voy a hacer. Siempre las comemos asadas. Las del mar mediterráneo son mas pequeñas y no dan trabajo para limpiarlas. Por cierto para los que les gustan asadas y no las hacen por el olor, hacedlas en horno muy fuerte en una bandeja con sal y un poco de aceite. Nada de olor.
ResponderEliminar