Trufas de frutos secos

Estas trufas solo llevan el azúcar de los ingredientes que las componen, que pueden ser todo lo variados que nos apetezcan, por lo que son aptas para una amplia mayoría de personas a las que poner un bocado dulce en su vida les aporta una pequeña satisfacción, incluso si sufren algún trastorno. En esta receta muestro la forma en que yo las he preparado, aunque como ya he dicho, la combinación de ingredientes está sujeta a modificación, condicionada por lo que podamos tomar o simplemente utilizando sobras que tengamos en la despensa, algunos ya sabéis que las de aprovechamiento son a la postre las preparaciones que más nos gustan. Salen unas 16 con estas cantidades, si os parecen pocas doblad medidas, que ya os digo que se comen con mucha facilidad. No es la receta clásica de cacao, mantequilla, licor,... ni falta que le hace, pues es muy rica y sana por sí misma. Así nos podemos permitir un capricho dulce sin apartarnos demasiado de los buenos propósitos post navideños. Solo uno ¿eh?

Ingredientes:

-180 g de frutos secos (yo puse higos, dátiles y orejones)
-50 g de anacardos crudos
-3 galletas
-100 ml de nata (puse de cocina)
-Coco rallado para rebozar
-Fideos de chocolate para rebozar

Preparación:

Quitamos el rabito a los higos, el hueso a los dátiles y troceamos un poco todo. Los trituramos junto a los anacardos y las galletas groseramente. Ponemos en un cuenco y le vamos añadiendo la nata poco a poco al tiempo que mezclamos hasta alcanzar la consistencia suficiente para hacer las bolitas. Se pueden meter a la nevera si queremos que cojan más cuerpo, pero yo las hice directamente cogiendo porciones con una cuchara y dándoles forma redondeada. Se rebozan en coco y fideos de chocolate y ya las tenemos listas para consumir.