Alcachofas rehogadas con gambas

 Cuando estamos en tiempo de alcachofas procuro aprovecharlas porque a diferencia de otras verduras, no se encuentran hasta la siguiente temporada, de noviembre a marzo. La de hoy es la clásica receta de alcachofas con jamón que he tuneado con gambitas arroceras, ya que al verlas en el mercado se me antojaron y las compré. Las blogueras cocineras somos mucho de cambios y adaptaciones y parece que si no los hacemos nos falta algo, se está convirtiendo en una costumbre. Un plato como este para una cena es casi un lujo, poca grasa y mucho sabor, en una preparación donde lo más difícil es pelar las alcachofas. Hay quien me dice que no son adecuadas en un fin de semana donde prima el rojo de San Valentín y sabores dulzones. Bueno, podemos acompañarlas con un buen vino o un cava y celebrar el día del amor y la amistad de forma diferente. Lo importante es vivirlo como nos apetezca, y sinceramente, a mi tanto corazoncito rojo me empalaga.

Ingredientes:

-8 alcachofas

-500 g de gamba arrocera

-1 cebolla

-4 dientes de ajo

-1 vaso de vino blanco

-Aceite y sal

Preparación:

Pelamos las alcachofas quitándole las hojas exteriores, cortando un trozo de rabito y pelando el que dejamos, eliminando las puntas duras y troceando en tres o cuatro partes, según deseemos queden de tamaño. Las vamos poniendo en un cuenco con agua (yo no les pongo limón) para que se vayan lavando. En una olla con agua y sal, las colocamos para cocerlas, el tiempo depende de la alcachofa y de lo tiernas que nos gusten, una media hora más o menos. Las sacamos y ponemos en un escurridor para que suelten el agua. Pelamos y troceamos menudos la cebolla y los ajos. Pelamos las gambas. En un fondo de aceite sofreímos la cebolla y los ajos, cuando estén casi hechos agregamos las gambas, las dejamos cambiar de color, sazonamos un poquito y añadimos las alcachofas. Mezclamos el conjunto y ya están para degustarlas.