Mini quiches de puerro y lechuga

 Son unas quiches en pequeño, por lo que si nos gustan para tapear, nos comemos una o dos acompañadas de un vinito, y si apetecen como entrante, nos ponemos el doble en el plato. Y todos contentos. Las "minis" se preparan igual que las "maxis", pero he introducido un par de elementos nuevos que no había probado: el pan de molde como base, que adelanta tiempo al no tener que hacer la masa, y las hojas de lechuga en el relleno que evitamos en las ensaladas por estar mustias o feas. El resultado es muy bueno y en un momentito podemos fardar de aperitivo ante propios y extraños, aunque iremos apuntando para más adelante, en mi caso somos dos y mi marido ya tiene costumbre de comer variado, así que poco o nada se va a sorprender. Pero ahora que todo el mundo (o casi) tiene San Valentín en mente, quizás sea una bonita manera de comenzar una velada. A mi me lo parece.

Al aprovechar las hojas de lechuga feitas para el relleno de las quiches, me parece que debo incluir la receta en el proyecto de Marisa , 1+/- 100, desperdicio 0, relacionado con el reciclaje, la reducción de desperdicios, el ahorro y la defensa del medio ambiente.

Ingredientes:

-1 puerro (utilicé la parte blanca y un poco más)

-6 hojas de lechuga 

-9 rebanadas de pan de molde

-2 huevos pequeños

-200 g de nata ligera de cocinar

-50 g de queso rallado

-Aceite y sal

Preparación:

Picamos el puerro menudo y comenzamos a rehogarlo en un fondo de aceite. Cuando esté casi pochado, añadimos las hojas de lechuga lavadas y picadas menudas también. Damos unas vueltas con el puerro, sazonamos un pelin porque el queso lleva algo de sal y apartamos. En un cuenco batimos los dos huevos, añadimos la nata, el sofrito y el queso rallado. Mezclamos bien, reservamos. Cogemos las rebanadas de pan y las estiramos con un rodillo para que queden finitas. En moldes de magdalenas o flaneras de aluminio acomodamos las rebanadas de pan igual que si fueran de masa, dejando el hueco en medio donde vertemos la masa reservada, se pueden cortar los picos sobrantes para que queden más redonditas, o no, eso va en gustos. Colocamos en una fuente de horno y las introducimos en el mismo que tendremos precalentado a 200 grados. Yo las tuve quince minutos dentro y diez minutos con el horno apagado y la puerta entreabierta, pero debéis vigilar las mini quiches porque puede ser que en vuestro horno se hagan antes. Pincharlas en el centro para comprobar si sale masa o no.