Vengo con un fiambre de pollo casero, bueno para completar ensaladas, o solo, servido con una vinagreta o salsa que nos guste. Otra forma sería meterlo en aceite, pues se conserva muy bien y se puede aromatizar con eneldo y pimienta, por ejemplo. El aspecto que presenta, blanco y de apariencia seca, nada tiene que ver con el punto de la carne, ya que se cuece en su propio jugo y queda magra y tierna. Está mejor recién hecho, pero si sobra, tampoco tiene desperdicio. La sal gorda que encontramos ahora, viene ya húmeda, no es necesario ponerle clara de huevo, ni agua, por sí sola forma una costra compacta que se puede romper fácilmente al término de la cocción, aunque eso no significa que no haya que tener cuidado de romper la carne. Una receta bastante veraniega por el tema que actualmente nos ocupa, el dichoso y enorme calor. Con ella me despido hasta septiembre, el blog también necesita su descanso y yo con él. Nos vemos pronto.
Ingredientes:
-2 pechugas de pollo enteras
-Sal gorda (1 kg aproximadamente)
-Tomillo y romero
Vinagreta:
-1 tomate
-1/2 cebolla
-1/2 pimiento verde
-Aceite, vinagre y sal
Preparación:
En la base de una fuente de horno disponer una cama de sal. Las pechugas de pollo deben estar limpias de telillas o grasita, se espolvorean con el tomillo y el romero, u otra hierba o especia que nos guste, se colocan sobre esta cama. Cubrir en su totalidad con otra capa de sal. Meter en el horno precalentado a 200 grados, 20 minutos. Yo las dejé fuera del horno otros 10 minutos antes de romper la sal y sacarlas a un plato. Se limpian bien de sal, si fuera necesario se lavan bajo el grifo, secándolas muy bien después.
La vinagreta la preparé pelando el tomate, quitándole las semillas (que podéis dejar) y troceándolo menudo. Pelé la cebolla, la partí por la mitad y corté igual de menuda que el tomate. Lo mismo hice con el pimiento. Por último aliñé con aceite, vinagre y sal.
La pechuga se puede cortar en filetes, rodajas o taquitos y utilizarla a nuestro gusto.
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Buenos días Lola. Qué rico fiambre, nunca he preparado las pechugas de este modo, y seguro me gusta, sobre todo porque me perece una manera ideal para tenerlas en el frigo e ir sacando según necesidad. Además deben dar mucho juego, como las sugerencias que nos haces. A mí no me importa que el pollo se vea blanco, es su color natural. Creo que para que la sal no se quede pegada a la carne, una vez asada, la clara de huevo juega un papel determinante, en las ocasiones que he preparado carnes o pescados de manera similar, lo he hecho y sale con mucha facilidad, me parece mejor opción que lavar la carne después de cocinada, para que no pierda sabor, es lo que me parece.
ResponderEliminarEsperaba que cerraras un día de estos, agosto es sagrado para ti, jajajaja…, disfruta de los tuyos, cocina lo imprescindible y descansa que también es necesario. Si te apetece pasa por DBM, aún publicaré esta semana y la que viene cerraré igualmente, ya lo he programado, pero si no, no pasa nada, nos vemos en septiembre.
Un beso y sé feliz.
Buenos días, Lola: Me gustan los pescados a la sal, pero nunca lo había intentado con las carnes. Me parece una receta muy interesante que tendré que probar. Además, como bien dices, puede resultar muy versátil.
ResponderEliminarEspero que tengas unas felices vacaciones. Un besazo.
Light, tender and very flavourful! I have only tried salted fish, salted duck, but not chicken. Wish I could taste some now!
ResponderEliminarLola, nunca he cocinado el pollo de esta manera, a la sal. Lo haré algún día, me ha gustado la idea.Por sí solo estará muy rico, pero ya se me ocurren ideas para usarlo en otras elaboraciones... Te deseo un buen verano, disfruta tu descanso y recarga pilas para la vuelta
ResponderEliminarAbrazos
Nunca he cocinado así la pechuga (ni comido). Me parece muy fácil y seguro que está rica, por no hablar de las posibilidades que se me están ocurriendo para aprovechar las sobras... Ya la he guardado en la carpeta de "pendientes" porque además tengo un paquete de sal para hornear que compré para no recuerdo qué y finalmente no utilicé.
ResponderEliminarDisfruta mucho de tu familia y del descanso estival. Y ojalá el verano os dé un respiro, pues no sé cómo aguantáis por ahí con esas temperaturas tan altas.
Hasta tu vuelta. Un beso.
Que rico este fiambre casero, Lola.
ResponderEliminarAhora viene el tiempo de disfrutar y recargar pilas.
Te deseo muy buen descanso
Besitos
Hola Lola.Te han quedado unas pechugas ideales para añadirlas a una ensalada o para tomarlas con unas verduras, siendo un plato rico y saludable. Besos y felices vacaciones 😘
ResponderEliminarGracias por la receta. Se ve muy rica fácil y genial para el verano. Te mando un beso. https://enamoradadelasletras.blogspot.com/
ResponderEliminarSemplice e leggero, ottimo piatto!
ResponderEliminarNo hay nada como los fiambres hechos en casa, una delicia, un beset Lola
ResponderEliminarEs una de mis combinaciones favoritas :D
ResponderEliminarUna receta de las que no se puede pasar sin hace. Ala sal si hice pescado, pero el pollo o carne nunca así que me llevo la idea 😉
ResponderEliminarQue disfrutes de las vacaciones preciosa ya nos vemos a la vuelta.
Besinos
Hola Lola! Excelente forma de preparar estas pechugas, debe quedar muy jugosas, he visto preparaciones así con pescados. Esta vinagreta le da mucha frescura y combina de lo mejor. Besos y disfruta mucho tus vacaciones, te esperamos a la vuelta con nuevas recetas y con energías renovadas!
ResponderEliminarHola Lola. Me perdí esta maravilla y menos mal que me he dado cuenta. Justo el sábado, hice un pescado a la sal y es verdad que se forma la costra sin problema.
ResponderEliminarMe encanta tu receta, sé que siempre me encantan todo lo que haces, pero esta vez, me parece de lo más original y útil.
Me han entrado ganas de comprar pechugas.
Feliz descanso y resto del verano.
Besos.
Hola Lola!!
ResponderEliminarMe parece muy buena opción para completar una rica ensalada.
Qué descanses y disfrutes de lo que queda del verano.
Nos leemos a la vuelta.
Besos ♥
Hola Lola. Que buena receta, me encanta por su sencillez. Y con esa compañía que le has puesto, me tomaría un platito, ahora mismo, sería una cena perfecta.
ResponderEliminarUn besiño bonita
Este extraordinario plato de pechuga de pollo a la sal tiene un aspecto fabuloso. Es extraordinariamente nutritivo y a la vez proteico y de gran sabor. Hará sin duda las delicias de los comensales a lo largo de una agradable comida.
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