Bolas de pollo y queso con salsa de cebolla

No quiero llamarlas albóndigas aunque se parezcan, son unos bocados que nos dan la oportunidad de comer carne de otra forma. Yo he elegido el pollo, pero a quien le parezca seca la pechuga, que utilice muslo u otra carne más jugosa, aunque os diré que al mojarlas en la salsa de cebolla quedan pringaditas y gustosas. Y como en casa parece que tengo ratones, les encanta que lleven queso en el relleno, o les podéis poner el ingrediente de "gracia"que más os guste. No se tarda mucho en hacerlas y solucionan una cena bastante bien, pues es una preparación nutritiva y nada pesada.
Os las dejo para el finde porque se les puede sacar partido también para un picoteo.

Ingredientes:

Para las albóndigas:
-2 pechugas de pollo
-200 g de queso mozarella
-3 huevos
-1 limón
-2 ó 3 cucharadas de pan rallado
-Harina
-Aceite, agua, sal y pimienta
Para la salsa de cebolla:
-2 cebollas
-1 vasito de vino dulce
-Agua
-Mantequilla y aceite
-Sal y pimienta

Preparación:

Pedí en la carnicería que me picaran las pechugas. Las puse en un cuenco, añadí el queso, un huevo, el zumo del limón, sal y pimienta. Pasamos todo por la batidora hasta formar una pasta homogénea, si como fue mi caso os queda una masa un poco blanda, añadir  pan rallado hasta que le veamos la consistencia adecuada para hacer las bolas. Con las manos humedecidas formamos las bolitas no muy grandes. Batimos dos huevos, les mezclamos dos cucharadas de harina y un chorrito de agua, que nos quede una crema espesita. Pasamos las bolas por ella y las freímos en abundante aceite caliente. Las sacamos y ponemos sobre un papel absorvente. Preparamos la salsa troceando las cebollas en juliana. En una sartén ponemos dos cucharadas de mantequilla y dos de aceite, incorporamos las cebollas y las dejamos pochar a fuego lento por espacio de media hora al menos. Vertemos el vino, salpimentamos y dejamos reducir casi completamente. Añadimos un chorrito de agua, damos un hervor y trituramos. Ponemos al fuego para que se caliente esta salsa y ya está lista para añadirla a las bolitas. También podemos introducirlas dentro de ella y calentarlo todo junto para que se integren los sabores.