Patatas rellenas

La de hoy es una guarnición con identidad propia. No necesitaría acompañar ningún alimento para disfrutarla en esencia, pero cuando se hace es todo un lujo en el plato y en el paladar. Visualmente estas patatas ya caen bien, pero cuando las pruebas se convierten en una ricura. Rellenos hay muchos y muy variados, yo me he inventado éste con ingredientes que nos gustan y que al unirse conforman una alianza muy bien avenida. El problema es que parece ser que siempre hago pocas porque suelen faltar, incluso cuando doblo las cantidades. Yo ya he llegado a la conclusión que es de esas incógnitas por resolver a las que ni siquiera la lógica es capaz de dar respuesta. Misterios de la vida.

Ingredientes:

-3 patatas medianas
-2 yemas de huevo
-200 g de queso emmental rallado
-50 g de cebolla frita deshidratada
-3 rodajas de jamón york
-200 ml de nata para cocinar
-Sal y pimienta

Preparación:

Lavamos las patatas y goteando las envolvemos en papel aluminio y las asamos en el horno a 200 grados una hora más o menos, depende del grosor. Lo mejor es pincharlas y comprobar que están tiernas. Las sacamos, partimos por la mitad de forma longitudinal y con la ayuda de un cuchillo y una cucharita las vaciamos dejando un poco de carne, como 1/2 cm, en el interior. Machacamos la patata que hemos extraído con un tenedor, añadimos las yemas, la nata, sal y pimienta, la mitad del queso, la cebolla y el jamón a trocitos. Mezclamos bien y rellenamos las patatas. Espolvoreamos el resto del queso rallado por encima, las introducimos en el horno unos diez minutos y después solo la parte de arriba para gratinarlas hasta que cojan un poquito de color.  Listo!