Bacalao con pistachos y crema de calabaza

Feliz día de los Santos, Tosantos y Halloween (bueno éste ya ha pasado). O los tres a la vez porque no son incompatibles, de hecho yo participo en todos. Hoy lo hago por Tosantos, que es lo que festejamos por aquí, así que mi receta está cargada de frutos secos y frutas de otoño, tal y como manda la costumbre. Este año no he querido hacer repostería, ya que estos productos funcionan de maravilla en la preparación que se incluyan, y como el pescado me encanta, sobre todo cuando va tan bien acompañado, propongo plato sano, ligero y muy, muy rico. Así después nos podemos tomar un postre típico de la efeméride o una merienda con la mejor dulcería del otoño. Recordaré con ello a las personas que ya no están conmigo, que me dejaron su legado gastronómico, entre otros, y que la tradición quiere que no olvide. A su memoria dedico este post, con especial cariño, por todo lo que de ellas aprendí.

Ingredientes:

-500 g de bacalao fresco (lomos)
-100 g de pistachos
-Aceite y sal
-200 g de calabaza cacahuete limpia
-1 yogur natural
-2 cucharadas de pistachos picados

Preparación:

Troceamos la calabaza, que tendremos limpia, en dados. La colocamos en un bol apto para microondas y la horneamos unos cinco minutos a máxima potencia, hasta que al pincharla con un cuchillo esté tierna. Le añadimos el yogur y trituramos con la batidora. A esta crema le ponemos las dos cucharadas de pistachos que tendremos limpios y triturados también. Reservamos.
Cortamos los lomos de bacalao en tacos grandes. Los salamos, los untamos  con aceite de oliva y pegamos sobre ellos los pistachos. Los colocamos en una fuente de horno, cubierta con papel vegetal, con la piel hacia abajo y asamos durante ocho o diez minutos a 180 grados. Ponemos la crema de calabaza en un cazo, la calentamos a fuego suave, la ponemos en un plato haciendo una cama, sobre ella ponemos el bacalao y el resto ya es disfrutar de este rico plato.