Es ésta una receta que publiqué en el inicio del blog, lo que se traduce en que pocos la verían, pero que no he querido dejar en el olvido porque se merece un lugar mejor, tengo pruebas que lo acreditan: el aplauso de quienes lo han degustado. Otra utilidad no menos importante es la de servir muy bien para llevar en fiambrera, no se la de veces que la habré preparado para pasar un día de campo. Ahora las cosas han cambiado un pelín y ya no se pueden hacer reuniones de familia con amigos, pero si para un picnic es adecuada, como almuerzo para el trabajo también lo es. Tenemos que adaptarnos al momento y no perder la alegría de vivir, pensar que los buenos tiempos están por venir. Mi amiga Ana dice que todo en la vida ocurre por algo, y yo, le voy a dar la razón. Quizás hoy, que entra el otoño, traiga aires renovados, con lo que me gusta a mi un otoño!, voy a darle una oportunidad, a ver si trae lo bueno y se lleva lo malo.
Ingredientes:
-2 berenjenas
-2 huevos
-Harina
-Agua
-Aceite y sal
-12 lonchas de jamón dulce
-12 lonchas de queso cheddar (o el que más os guste)
-2 c/s de mantequilla
-2 c/s de harina
-1 1/2 vaso de leche
Preparación:
Pelamos las berenjenas, las cortamos en láminas finitas, mejor con una mandolina para que queden todas iguales, si no con un cuchillo. Ponemos en un cuenco, les vamos espolvoreando sal y las dejamos reposar una media hora. A continuación las lavamos bajo el grifo y secamos. Preparamos la masa para rebozarlas batiendo en un cuenco los huevos, agregamos la harina al tiempo que la vamos integrando con unas varillas, vertemos también un chorrito de agua para que no quede muy espesa. En una sartén ponemos un buen chorro de aceite de oliva, rebozamos las berenjenas en la tempura y las freímos por ambos lados, apartando a un papel absorbente. En una fiambrera de cristal, pues luego habrá que meterla en el horno, colocamos una cama de berenjenas, sobre ellas acomodamos lonchas de jamón dulce y sobre éstas lonchas de queso. Repetimos la operación hasta que nos queden unas pocas berenjenas, las suficientes para tapar la superficie, ya que terminaremos con ellas. Hacemos una bechamel poniendo en un cazo la mantequilla, cuando se derrita añadimos la harina, cocinamos y vamos agregando leche al tiempo que removemos con una varilla para que no haya grumos, en caso que así fuera batimos con la batidora, la cantidad de leche irá en función de lo espesa que la queramos. Sazonamos. Cubrimos con ella las berenjenas de la superficie. Gratinamos en el horno unos minuto, hasta que coja solo un poco de color. Y listo.
Toca adaptarse a los nuevos tiempos, esas reuniones o comilonas con muchos amigos o familiares quedan un poco de lado, pero siempre podemos darnos un homenaje los que vivimos en casa, que no nos falte la salud, la alegría y un buen plato como este pastel de berenjenas que yo lo veo muy rico, será porque me gustan las berenjenas en cualquier receta y esta es festiva.
ResponderEliminarBesos.
Que maravilla de plato, nunca hice así las berenjenas y me han encantado, un pastel que da unas cuantas raciones, tiene que estar delicioso...Bess
ResponderEliminarMi querida Lola, voy a darle la razón a tu amiga. A priori una pandemia no trae nada bueno. Arrastra enfermedad, muerte, dolor, miedo... pero con el prisma que da el paso del tiempo podemos entender que hasta de algo tan horrible podemos sacar cosas buenas. Cada uno las suyas, pero seguro que para algo tiene que servir esta situación de pesadilla que estamos viviendo.
ResponderEliminarTu pastel de berenjena me ha flipado. Este verano el huerto de mi padre está siendo muy fructífero (mis manos dan buena cuenta de ello, que ayer estuve asando un montón y se me han manchado bastante)y estoy asando y congelando para preparar mousakas y cualquier receta buena como la tuya que se me cruce.
No sabes la buena idea que me has dado. Este finde la preparo
¡Besos mil!
Qué rico Lola, y como tú explicas "para llevar" es ideal. Este tipo de pastel de berenjenas lo hacemos en mi casa desde hace años. Aunque con una diferencia. Yo, cambio el jamón cocido por pimientos del Piquillo cortados por la mitad y queda, también, de rechupete. Besos querida amiga.
ResponderEliminarPues no me puede gustar más Lola!!
ResponderEliminarTodo lo que lleva bechamel y gratinado me vuelve loca!!
Has hecho bien en volver a refrescarnos esta receta tan rica ;)
Besos
Qué pena Lola, estas recetas tan buenas de nuestros inicios como bloggers y que a penas tienen visitas, pero haces bien, de vez en cuando hay que darles un repaso y ya puestos, actualizar las fotos, porque lo que es evidente, es que la receta siendo buena no se puede cambiar, bueno, aunque a veces yo hago cambios, es irresistible, y así le doy una nueva variante que hace que el mismo plato, parezca distinto.
ResponderEliminarEn casa también lo hago igual, de hecho lo tengo publicado en sus dos versiones, una tal como tú lo haces, con bechamel, y otra tipo Tortilla, a veces la hago en sartén, y otras lo pongo en un molde y lo horneo, al final el resultado siempre es riquísimo, y tanto en frío, como caliente, es un pastel que siempre triunfa.
Tu amiga Ana, tiene más razón que un santo, las cosas no suceden porque sí, y lo que ha llegado, es para quedarse, o dejar una huella imborrable, en nuestra mano puede estar o no cambiarlo, pero lo que sí está en nosotros, es adaptarnos a esta nueva realidad, nos guste o no.
Besos, que pases una buena tarde.
Hola Lola! Muy bien que traigas de nuevo esta receta y poder disfrutarla porque está buenísima, como para que nadie se la pierda. Los inicios de blog son muy emocionantes, uno se embarca en esa nueva aventura con mucha ilusión, lo triste es lo que cuestan las visitas, jaja, y los blogueros más valientes y tenaces sobreviven y siguen el camino, así como tú con esta cocina maravillosa y tan cercana.
ResponderEliminarMe pido una ración del pastel, ñam!
Besos!!
Menuda delicia de pastel
ResponderEliminarHago un pastel de berenjena muy parecido, que ahí está en borradores, esperado su turno, pero me gusta mucho el tuyo pues es muy práctico para cuando no tienes mucha berenjena pues al ir rebozada, aumenta el plato. Tomo nota y así varío un poco respecto del que yo hago.
ResponderEliminarTodo pasará y vendrán tiempos mejores y si no es con este otoño que empieza, lo será con el invierno que le siga, pero pasará. Se nos está haciendo largo porque somos un país de muchos besos y abrazos, de relacionarnos mucho con familia y amigos y las nuevas tecnologías, aunque algo ayuden, no sustituyen el contacto cercano.
Animo guapa. Un beso.
Lola, también es mi estación favorita el otoño.
ResponderEliminarEste pastel solo hay que verlo......delicioso!!
Unn abrazo.
Lola que rico no lo he probado pero tomo buena nota besitos
ResponderEliminarNo es de extrañar que recuperes esta delicia seria un pecado dejarla en el olvido 😳yo también soy de la opinión de que nada sucede porque si🤷♀️las cosas suceden por algo😳Cuidate💪 besinos
ResponderEliminarHola, Lola. Se me ha hecho la boca agua al verlo en IG y eso que no había leído la receta. Soy fan de las berenjenas y coincidimos me parece en ese gusto, porque ya te he visto alguna receta con ellas. Has hecho bien en reeditar la entrada, tenemos tantas, que las de los inicios, son buenas y nadie las ve. En mi blog ahora, ha aparecido por sorpresa una que creo que es de 2012.
ResponderEliminarMe gusta tu pastel y me lo llevo.
Besos y cuidaos.
Querida Lola, ojalá el universo o quién le toque te oiga y este otoño se lleve toda esta ruina que tenemos encima, no podemos perder la alegría, tienes razón, pero la cosa no está fácil...
ResponderEliminarEn cuanto a la receta, decirte que me gusta mucho cocinar con berenjenas, pero nunca me ha dado por hacer un pastel como este, se me ha antojado nada más verlo
Abrazos!!
Lola tu pastel se ve delicioso, esa combinacion de jamon con la berenjena es de a 10! Y que razon tienes, hay qus seguir viviendo y disfrutar la vida, si nos tenemos que adaptar, nos adaptamos, pero nunca debemos perder la alegria! A mi tambien me encanta el otoño!
ResponderEliminarBesos
Holaaaa !!!! como no va estar rico ese pastel de berenjena...debe de estar de diez y de veinte !!!! con ese gratinado final....desde aqui se huele!!!
ResponderEliminarBesitos tesoro y no toca otra que seguir cuidándonos mucho.
Un pastel delicioso sin lugar a dudas , también lo suelo preparar parecido , tanto con berenjena como con calabacín y siempre desaparece rápido , eso es señal de que está bien rico.
ResponderEliminarHay que adaptarse, no nos queda otra y celebrar cada día la vida que en estos tiempos que corren , no es poco.
Un abrazo Lola y feliz día.
Una maravilla de pastel. Que la ilusión no nos las quite nadie o nada, que siempre sale el sol después de llover. ¿o no?
ResponderEliminarBesos y feliz fin de semana,
Palmira
Hola Lola, las berenjenas tienen tantas posibilidades!!!!! me encantan. Cuando era pequeña no me gustaban, pero ahora siempre que puedo las utilizo. Tal como las has hecho tu no las he comido nunca. Si con tomate y queso; como musaka; fritas, en sofritos, pero así, no. Ahora ya tengo una nueva sugerencia, la guardo y te la copiaré . Besos.
ResponderEliminarHola Lola.
ResponderEliminarMe encantan los pasteles y me parece de lo más rico una bechamel... así que para mi este pastel es una delicia... y aunque no compartan plato por aquí, por eso de que la mayoría de verduras ni hablar, y mira que lo he intentado, pero nada, pues cuando me apetece me los preparo para mi.
Es bueno ir poniendo nuestras primeras entradas, que muchas de ellas no se vieron y bien merecen esa segunda oportunidad, sobretodo cuando el plato está riquísimo como le pasa a este pastel que nos traes.
Un besazooo enormeeeee!!!