Pastel de cabracho

También conocido como paté de cabracho o pudin. Es un pescado de lo más feo, por cierto, y a veces, difícil de encontrar, por lo que hay quien lo sustituye por gallineta e incluso merluza. Personalmente creo que la receta no está igual pero no siempre se puede hacer con el original. Se suele untar en tostadas y acompañarlo con mayonesa o alioli.
Hay que intentar que la cuesta de enero nos sea lo más leve posible y siendo cierto el dicho de que a las personas se nos conquista por el estómago, podemos lucirnos con este entrante austero de ingredientes, sin complicaciones para su elaboración y sano para el organismo al que ultimamente hemos tratado con excesiva generosidad. Así que ahora a cuidarse toca
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Ingredientes:

-300g de cabracho
-3 huevos
-200 ml de nata
-200 ml de tomate frito
-2 cucharadas de coñac
-Tostadas
-Alioli
-Sal, pimienta y laurel

Preparación:

En una olla con agua y dos hojas de laurel se cuece el pescado hasta que se blanquee. Se saca, se deja enfriar y se limpia muy bien de piel y espinas. Se pone en un cuenco al que se le añaden los huevos, la nata, el tomate frito, el coñac, sal y pimienta. Se tritura en la batidora cuidando de que la textura nos quede gruesa. En un molde rectangular ponemos una tira de papel vegetal en el fondo que pintamos con aceite al igual que las paredes. Vertemos la crema obtenida, tapamos con papel aluminio y metemos al horno precalentado a 180 grados y al baño maría unos 40 minutos. Pinchamos para asegurarnos de que esté cuajado como si fuera un flan. Sacamos y dejamos enfriar, mejor de un día para otro. Desmoldamos con cuidado, untamos sobre tostadas y acompañamos de alioli.